Padezco últimamente de impudicia verbal, suelto todo lo que pienso y lo que no, he perdido el filtro, los amigos se me quejan, esto tampoco es nuevo, desde aquí pido disculpas.
Hoy contaré unas vacuidades sobre la vez que trabajé de dependienta en Sexyland, un sexshop de los de cabina, videoclub y vitrinas repletas de vaginas con asas, tecnopenes y demás ortopedias.
Esto era antes del euro, antes de que llegaran a España las elegantes jugueterías sexuales para mujeres, yo no vendía dilditos con forma de pingüinito verde ni botecitos de chocolate con pincel para aplicar. Yo vendía gordas pollas de plástico con venas, elixires calientaburras, electrodos para pezones y arneses, además gestionaba un videoclub donde no había ninguna clienta y me encargaba de que los 69 magnetoscopios que correspondían a los 69 canales de vídeo de las cabinas funcionaran correctamente.
Y eso fue durante tres meses de verano, el tiempo necesario para terminar de conseguir las pelas que me permitirían largarme a estudiar a una Escola d´Art de Barcelona , estaba llena de futuro.
El porno no me ha interesado nunca demasiado, y no había analizado bien el porqué hasta que me puse a escribir esto, quizás sea porque cuando me excito me suele apetecer tener carne humana y ajena al alcance de mi mano. Sí, soy muy práctica y prefiero recrearme en cuerpos que estén a mi alcance inmediato y eso frente al pornotube no ocurre y es frustrante. Y si no hay cuerpos amables cerca recurro únicamente a la imaginación o la memoria, onanismo evocador lo llaman. ¡Soy tan romántica!
Por eso mismo nunca me ha llamado el cine x y cuando entré a trabajar en sexyland no había visto una peli porno, a excepción de unos trozos de las que ponían en la tele local que no me llamaban la atención salvo si salían enanos, gordas mórbidas o situaciones absurdas, entonces miraba un rato antes de zapear.
Esto es, que el porno no me sirve como estimulante ni como inspiración onanística, sólo me interesaba como espectáculo de lo nunca visto y lo absurdo. Y la desnudez y los genitales expuestos tampoco me llamaban la atención, me he criado en el Cabo de las Huertas de Alicante, con un acantilado que era zona naturista y también de cruising. Cuando era niña íbamos en pandilla y con los perros a las rocas "a ver pichas y tetas" y a cazar cangrejos con cubos de horchata, la segunda actividad era la que mas excitación y grititos nos causaba.
De mi experiencia de dependienta en un sexshop salí hecha una conocedora, no una consumidora pero si una experta del medio pornográfico, incluso salí teniendo un actor porno favorito, Toni Ribas, por esa mirada suya que se ve poco en un medio donde todos los tíos ponen cara de mal cagar o de mal rollo, se muerden el labio superior, fruncen el ceño y hacen como que soplan, pero Toni is different. Y no soy la única en percibirlo.
También averigué para mi sorpresa y horror que muchísimas actrices se hacían un corte en el perineo para poder realizar ciertas prácticas y alargar su carrera. Y me contaron otras operaciones para los actores que causan más horror aún.
Si alguna vez entraste en un Sexyland y te maravillastes al ver tras el mostrador a una hermosa muchacha morena de 21 años leyendo un librito de poemas de Emily Dickinson,
(Soy nadie. ¿tu quien eres?
¿Eres tú también nadie?
Ya somos dos entonces. No lo digas:
lo contarían, sabes.
Qué tristeza ser alguien,
qué público: como un rana
decir el propio nombre junio entero
para una charca admiradora.)
y próxima a una réplica de John Holmes la veías suspirar en los versos concentrada, evocando las briznas de hierba temblorosas, plumitas de alondra, y atar no intentes a la mariposa, una muchacha que borracha de lirismo retorcía un mechoncito de su pelo entre los dedos, sí, sí, esa joven era yo. Seguro que te enamoraste de mí, pero de poco hubiera servido que intentaras algo conmigo, habrías fracasado, yo en ti sólo hubiera visto a un PAJERO.
Y había muchos y de muchos tipos, y todos estaban observados, analizados y catalogados por mi y mis compañeros, un equipo de tenderos fantástico, una joven e intrépida lesbiana, un joven y hermoso gay y yo de joven. Sí, tan jóvenes, dinámicos, extrovertidos y liberados que jamás hubiéramos hecho ningún gesto de asombro ante tu petición del dilatador anal tamaño xxxl de silicona negra con ventosa en la base, te habríamos ofrecido dulce y amablemente el mejor lubricante del mercado, el de base de agua, el que no pica el látex, y te hubiéramos envuelto el regalo y que pase usted un buen día caballero, vuelva cuando quiera.
Con los pajeros de cabina apenas tenía ninguna relación a no ser que no funcionara la máquina de cambio, normalmente ellos iban directamente hacia el pasillo cabinero y no se acercaban jamás al mostrador de los dependientes. Tengo que reconocer que en mi absoluta inocencia me sorprendía mucho ver entrar a pajeros bellos, en mi ideal sistema de valores, en mi pardillez, eso no podía existir, sólo los contrahechos no encontraban amantes, la gente que se masturbaba era porque no tenía a quien amar. El tiempo me haría cambiar de opinión pero así de gilipollas era yo, atiende.
Era bastante joven y reconozco que contarle a la familia que iba a currar en un sitio así fue espinoso, yo insistía en que era un simple trabajo de dependienta y que los pajeros eran gente muy educada. Y era cierto, jamás en esos tres meses escuché una palabra fuera de tono, ni una insinuación, ni un doble sentido, ni un gesto de mal gusto o mala educación por parte de la clientela. Eran personas que compraban o alquilaban cosas que atañían a su intimidad y por eso mismo el trato era sobrio y respetuoso por ambas partes. Una camarera de disco-pub no puede decir lo mismo.
Las estanterías estaban ordenadas por estilos o géneros, primero estaban las Private, de guapas rubias californianas con depilación a lo mohicano, después las Edad Legal, ya saben, luego las Oma, de señoras maduras, estas pelis las alquilaban normalmente chicos muy jóvenes y tenían mucha demanda, seguían las Real o Amateur, que casi todas eran alemanas y estaban junto a las Hardcore hetero, luego venían las Tranxs, que también tenían muchísimo éxito, y el Kaviar, la Zoofilia, el SM y las aberraciones al final del pasillo, al lado de lo Gay.
Algunas de estas pelis estan entre las cosas que mas me impactaron negativamente en mi experiencia sexyland, tanto a mí como a las amigas de mi quinta que venían a la tienda a darme conversación o a pedirme condones. Eran las carátulas que yo procuraba no mirar cuando me tocaba ordenar estanterías, en serio, cerraba los ojos:
-Una de felaciones realizadas por ancianas desdentadas. En la portada aparecía una vieja muy desagradable mirando y sonriendo a cámara con la dentadura postiza en una mano y una polla flácida y fea en la otra. Me provocó pesadillas.
-Una peli de una tía que se metía bichos en la vagina, sí, bichitos de bola, babosas y cienpieses. La portada era un coño muy feo y oscuro, de estos con mucho pavo de donde salía una cucaracha, así de asqueroso.
-Una de aspecto amateur, con hooligans que golpeaban y se follaban a yonkis cadavéricas de la calle. Era alemana, era lo peor.
-Todas las de fist fucking, no les veo el sentido, no lo puedo entender.
También se vendían películas especiales por encargo de algunos clientes selectos, eran pelis que llegaban de importación completamente precintadas y que se guardaban bajo el mostrador a la espera de que viniera el interesado a recogerlas, ni idea de qué trataban, mucho misterio. Los clientes no encargaban estas cintas a los dependientes sino que trataban por teléfono directamente con el jefe.
Había un encantador señor mayor, unos 85 años, muy delgado, erguido y elegante, traje de tres piezas y exquisita educación:
-Buenas tardes, ¿ha llegado ya lo mío, señorita?
-No tengo ningún paquete para usted, lo siento.
-No se preocupe, ya volveré a pasarme si no le causa molestia, que tenga usted un buen día.
Y siempre sonriente y cortés, apreciaba realmente a este señor, ¿qué tipo de películas serían esas? Mejor no pensarlo.
Pero lo peor, lo que me impactó hasta el trauma, lo que más estupefacta me dejaba, eran las petardas de las despedidas de soltera. Venían en manada y antes de entrar ya se las oía:
"¡Entra tú primero, noooo entra tú, jijjiiji!" "Jiiiiiii, jiiiiiiiii, jiiiiiiii" "Qué fueeeeerte, tíaaa!
Y lo peor es que entraban. Y hacían un ruido como de cerdas en un matadero, resoplaban, bramaban, se agolpaban y tropezaban entre ellas, y reían con gritos hiperagudos, eran monstruosas.
Lo que compraban era peor, ¿cómo un ser humano puede voluntariamente colgarse del cuello un recipiente con biberón de polla y verlo divertido? Cuanto más humillante y vejatorio era el artículo más gracioso lo encontraban: cascos vikingos con pene de peluche en vez de cuernos, sombreros vaqueros con estampados de vaca y pene, por supuesto, de peluche otra vez, penes de peluche a secas, con grandes sonrisas pintadas, chupetes gigantes con pene, esta vez de goma, para poder chupar y aberraciones de esas.
Eso sí, yo de alguna manera me vengaba y/o divertía. Con la mejor de mis sonrisas intentaba colarles la máxima aberración que era siempre la más cara: el enorme sombrero mexicano con purpurina, lentejuelas y polla de peluche king size en la copa, "Mirad qué gracioso, chicas, esto no pasará inadvertido ¿eh?, je je". Y las cerdas a veces lo compraban, mis jefes estaban encantados.
Que alguien me desvele el misterio de las manadas de tías en las despedidas, ¿por qué lo hacen? Imagínatelas, con esos sombreros, los gritos, esos biberones, y los boys.
Esto no tiene mucho que ver con mi batallita de ex-tendera de sexshop pero tengo que expresarlo o reviento:
Que a mí me dan mucha pena los Boys. Más que los caballitos ponis. Me dan lástima sus pichas amoratadas por esa goma que se ponen en la base para morcillonársela, cockring se llama.
Y me conmueven esos bailes tan bobos con movimientos pélvicos indignos, y sus mañanitas en el gimnasio con el gatorade y la toallita, y en la ducha afeitándose el culo con la gillete y con sus granitos de pelos enquistados, las pectorales tan hinchados que obligan a los pezones a mirar con tristeza hacia abajo, y sus muequitas martini frente al espejo y sus noches dejándose sobar por señoras que gritan como hienas. Esa marabunta de suegras y cuñadas histéricas que parece que no han visto una polla en su vida y les asalta un instinto lactante e impúdico que no es de recibo, que indignidad señoras, qué poco recato.
Y esos uniformes que me llevan los boys, ay. Me imagino el cajoncito de la cómoda donde el boy de turno guarda sus tanguitas de vinilo dobladitos y me pongo a llorar. No me invitéis jamás a un show de estos si me queréis un poco, matadme antes.
Y bueno, no me acuerdo ahora de más cosas. Bueno sí, que las bolas chinas no se vendían casi nada, que los dildos gigantescos sólo los compraban hombres, ya sea para su uso propio o para usarlos con las parientas, que las tías sólo compraban vibradores, núnca consoladores y además de tamaño tirando a pequeño, o huevitos masajeadores de goma, esto puede crear suspicacias porque confirma la teoría de Freud de que las hembras somos sexualmente inmaduras.
También que la ropa interior erótica que se vende en estos sitios es de pésima calidad. Que los lubricantes salen más baratos si los compras en la farmacia, que los condones de sabores no triunfan y que hay hombres, más de los que te imaginas, que creen que los elixires calientaburras funcionan y los compran para echarlos en la bebida de las tías, y que sólo contiene agua con cafeína o taurina pero que de ilusiones también se puede vivir.
Que currar en Sexyland era mucho mejor que currar de teleoperadora, que se podía leer.
Y ya está, fin de la batallita, gracias.
41 comentarios:
Las petardas de las despedidas de soltera hacen lo que hacen porque no respetan el pene, ni lo entienden ni lo aman. A mí me dan pena.
Si, de respetar el pene se trata.
Es justo por ese motivo por el que los boys resultan tan patéticos. Cero respeto.
Lo mismo, sí
joer tía, no sabes lo tremendamente identificado que me he sentido con este texto. yo trabajo en un ayuntamiento.
Vaya, dewinter es un discípulo del terapeuta bravido de Magnolia, hay que respetar el pene y entenderlo, sin esta premisa no vamos a ningún sitio.
No puedo dejar de mencionar mi inquietud ante el cariz de las últimas palabras de Millana. El termómetro de su yo está alcanzando niveles que ni los reactores de Chernobyl en el día de autos. Yo también me habría enamorado de una clerk morena leyendo a Emily Dickinson con cara de borde, porque me parece estar viendo esa genuina expresión de borderismo y altivez que han dejado huella en el circuito underground capitalino. Claro que en cualquier otra circunstancia uno sospecharía de una lectora de la Dickinson e inspeccionaría su bolso en busca de tetrazepam mnientras su propietaria se adecenta en el toilet.
Por cierto, voy con Rusia, un país por debajo del nivel del mar merece mi antipatía.
¿Eh?
No tengo cara de borde...
Me ha dolido.
Si, por ese verano leia a Emily y escuchaba el Berlin de Lou Reed tres veces por semana y el Forever Changes de Love todos los días y el Taz de Hakim Bey era mi biblia, ¿se puede sacar conclusiones de todo esto? Pues si y pues no. ¡Y que mas dá!
Y 10 años después solo escucho musica sacra o free jazz y veo la tele.
¿Que leias tu a los 21 años?
Voy con España y a la plaza en minifalda.
Me gusta esta Millana confesional y piadosa que restituye en algo la dignidad al varón. De niña no le perdonaba no ser príncipe; de mujer, le turba su derrumbe.
Yo creo que la Dickinson, hoy, hubiera hecho lo mismo salvo ir a la plaza en minifalda, aunque sólo fuera por no haber de descender, odiosa, irremediablemente, a la poesía de la experiencia.
Lo de meterse bichos en el (...) no se me había ocurrido.
¿Habrá peliculas con bichos que piquen o sólo con inofensivos escarabajos?
Yo la titularía "Yo te piqué el punto G"
Buenas noches.
Con 21 años no leía apenas, me preparaba para ser un tiburón de la publicidad (luego devine asustadizo halibut del diseño gráfico).
Fernando, que tiene madera de alienista, ha descifrado el 'quid' de tu empatía.
Anoche viví en un bar la misa pobre del fútbol. Luego celebramos con alegría el triunfo asustando a los capullos que salían de la Filmoteca. ¿Viste Sexo en Nueva York? Los lectores de MILDRED merecen una crítica adulta.
Si Fernando lo ha dicho todo y lo ha dicho bien, y yo para eso he tenido que soltar todo este rollo costumbrista con justificacion antipornográfica tramposa incluida. A partir de ahora mis post sera aforismos, máximas o haikus, o no seran.
Nabo, me alegro de no estar tan sola.
Sildaviano, habrá de todo solo conlleva el trabajo de buscarlo si te interesa. Supongo que ya existirán tesinas del tema vagina-bicho y todo.
Clovis, ayer vi el Incidente en un cine de centro comercial y con esto solo puedo decir que viva el emule y viva The Host. Y que Mark Wahlberg ya ni esta bueno.
ay los boys...
creo que te conté que hace años yo tuve que hacerle a medida dos tangas a Thomas, de los famosos Thomas´boys...(ese televisivo chico rubio de sonrisa profident y expresión profiláctica tan característica de los bailarines depilados y aceitosos)
Hay mucho boy de hoy en día haciendo ciber-streaptease, desnudandose post a post, post a post...claro que algunos el tanga lo llevan en la cabeza...
La típica unión de despedida de solteros y sexo nunca la he entendido. Y menos entiendo que una polla en la cabeza sea uno de los artilugios sexyland, más escogidos, para exhibirse en una petarda noche de no juerga.
¡Abajo las despedidas de solteros! ¡Arriba las celebraciones con sexo duro de praxis oriental!
Entré ,vaya a saber porqué leyendo el increible post de Monica Naranjo..y anonadado me quedé..
a la altura de José Tomás la pondria yo, en el altar de la españolidad enfatizada,,( esa mezcla de diva trágica me encanta es cierto)
,
Yo soy alicantino ¿ tu pues lo eres? que pena de ciudad tan fea nos han echo,,,y conozco el cabo de las huertas,,si,pero siempre me dio reparo en acudir a la llamada voyeurista de ver pelotas picadas,,aun asi,ya en la playas ¨normales¨se ven medio desnudas a las mujeres íberas,copiando el modelo escandinavo-alemán,ingés de hace años de enseñar volumen .
Repudio la mala estética sexualizada que se está imponiendo...es digno de verse como las mujeres de toda edad,-porque las edades de transito han desaparecido para dar lugar a la juventud eterna, ,la adolescencia implacable-festejan el sumum de su liberacion yendo al sex shop a implorar artilugios que den po r bueno la publicidad inserta en sus cabecitas para fantasear con eso,medio y fin de esta posmodernidad,,
¨y las aberraciones camparán a sus anchas¨alejandro versiculo 1-1000¨
saludos Millana
pd¨le he dado un caracter parodico a mi entrada no sabia como opinar seriamente ,,y escribir y hablar son dos lenguajes
por cierto me llamo Alejandro,
Joaco,
que bonito imaginarte cosiendo tangas, lo desnudarse post a post con un tanga en la cabeza da que pensar, yo corro ese riesgo, me cuidaré.
Anonimo,
estoy contigo, ¡Abajo eso y arriba lo otro!
Alejandro,
Que alegría tener lectores alicantinos, hermanados en el sufrimiento y mas en estos días de fogueres, mi calle apesta a dolor y a cerveza derramada y podrida.
Escribir y hablar son dos lenguajes, igual de incómodos los dos, yo apuesto por el arte del mimo y las paredes invisibles. ¿Pa que mas?
Un abrazo.
Me sumo al comentario de Dewinter sobre las petardas. Y comprendo tus apreciaciones sobre los pobres pajeros de clase media, Millana: a mi también me dan pena, teniendo que ir a un alcampo del sexo para procurarse, por vía vicaria, satisfacciones que sus jefes obtienen en carne y hueso sólo con llamar a un servicio de escorts. Cosas de clases.
De las sex shops cultas, estéticas y para mujeres podría hablar un rato (he tratado con algunas, profesionalmente) pero sólo señalaré que suponen un encuentro inestable entre los conceptos del bollofeminismo queer y las ansias de cosmopolitanismo (de Cosmopolitan) que han invadido de repente a muchas maris de esas de las pollas de plástico: capitalismo salvaje, presuntas "políticas de género" y puras ganas de follar, juntos, revueltos y en busca de excusas autojustificatorias. Muy mal rollo.
No sé, he conocido a chicas lesbianas que iban a sex shops cutrongos a ver a las strippers. Porque les gustaba, nada más, sin chácharas de feminista pro porno ni gritos histéricos de tía hetero frente a un boy. Sólo porque querían ver a una chica guapa meneando el bullarengue. Eso, a mi entender, es una actitud sana y respetuosa para con las profesionales, que se quedaban flipadas, por lo visto, al darse cuenta de que había mujeres observando el espectáculo.
Pero, aún así, al pajerín con camiseta de Joy Division me lo hubiese calzado sin problemas. Dicho queda.
Antes de que se me olvide: suscribo también tu apreciación por Toni Ribas, el único actor porno hetero capaz de inspirarme ternura. Testimonios autorizados dicen que es timidísimo, además.
Si ,je. la mia huele a pegajosa acera -aun habiendo pasado el hombre de verde o amarillo-humilde barrendero-
pero que no hay manera, y mas con este calor 99% humedad..
en la fiesta dicen que nos igualamos,,en mi caso a no dejar dormir,,y la mania de los petardos de los niños,con sus padres, sin ellos-aprenden rápido,...en fin resignación..80 aniversario de las hogueras y mas de lo mismo,,yo volveria a la quema de trastos viejos,,eso si era verdareramente popular.por entrañable,y nostalgico,,- digo yo que seria asi-,no se ,,
ademas la noche de san juan es la del 23 al 24 y no la del 24 al 25 ¿ no?
En cuanto a la pornografia,,es la ideologia predominante,se ha democratizado mas que ninguna,,- EL RASURADO LO HAN EXPORTADO LAS PELIS PORNO a las personas, al común..primero en mujeres despues en hombres ¿ no?..-junto a la la farmaceutica, y la publicidad, forman un triunvirato -de esto mentes lucidas podrian hablar.- explosivo,,-Y ENTRELAZADO CREO YO-
son los signos de los tiempos
pd: el arte del mimo siempre se me queda como algo nostálgico,casi inefable,triste.pero se me queda en la retina
Pickman,
Yo no se si un escort sustituye siempre la eficacia y el uso de las cabinas, supongo que obedecen a necesidades diferentes, la cabina ofrece un desahogo rápido y aseptico con varios canales de fantasía a tu disposición, también estos locales estan muy bien situados en la ciudad, no es dificil encontrar uno cerca de la casa u oficina. Recuerdo que las horas de mayor transito era las de después de comer cuando los oficinistas trajeados y ejecutivos de las empresas del centro se pasaban para sus 5 minutitos de sobremesa después el café.
Ahora con el internet en los móviles habrá cambiado la cosa.
Alabo tu comentario sobre los sexshops elegantes y violetas, lo has dicho todo, que lucidez!
A mi Toni Ribas no me inspira ternura, simplemente me parece sexy, puede que sea de los pocos que no trabajan abofeteando con cara de mal rollo a sus compañeras de curro y eso le hace parecer mas dulce pero no se yo. De todas formas la moda de abofetear esta en auge y Toni como director y profesional del medio ya habrá hecho uso de ella. Claro que si.
El pajerin de la camiseta de Joy Division es monillo si, y tiene unos bonitos brazos.
Hola Alejandro,
del rasurado púbico ya hablamos largo y tendido aquí, incluido un interesante a la vez que bobo debate en los comentarios:
http://blogmildred.blogspot.com/2008/03/bajarse-del-coche.html
por favor, que toni ribas será loq querais que sea pero no deja de ser un asqueroso actor porno. y encima no luce ni el tamaño. y su mujer es una lagarta de cuidado con laq ni he conseguido pajearme una sola vez. bueno una, pero no se le veían ni las tetas, era en una cama anunciando un telefono erótico con un pepino en la mano.
y aunq escribir y hablar sean lenguajes distintos el primero debe tratar de imitar al segundo.
muy curiosas las apreciaciones Millana,
yo para ponerme al dia de los desvarios sexuales, me he agenciado en la biblioteca de un libro llamado testo yonqui de baetriz preciado,por lo que he leido es a la vez un lúcido ensayo sobre la industria farmacopornográfica y po0r otro la autora cuenta en paralelo como se aplica testosterona,,si, ,,testosterona
la transformación del porno en la nueva cultura de masas,etc etc.la pildora,el viagra etcetc
¡Vaya, Beatriz Preciado! Pero aquí se la estima mucho, a ella, a sus antebrazos y a sus geles de testosterona. ¡Es tan bonica!
Le dimos un homenaje que viene mucho a cuento:
http://blogmildred.blogspot.com/2008/04/sin-pene-ni-gloria.html
Como si de un The Rocky Horror Show se tratara, me se de memoria su interviu con Joderosky y la interpreto en las fiestas siempre que decaen o me lo piden.
¡Un abrazo!
Vaya,que casualidad, tendré que repasar este blog je, muy chocantes las intervenciones y comentarios
un abrazo
Aquí todo es chocante.
Y Millana es inteligente, moderna y atractiva.
¡Y me debe una camiseta!
Clovis es pizpireto y un caballero español de fina estampa.
Nabo solo suelta verdades como puños.
A Culoz lo debo una camiseta. (Manda un mail y da la talla y preferencias)
millana no tiene pinta de ser tan atractiva. inteligente vale.
Verdades como puños, nabo.
Que sí, Nabo, que sí, lo que pasa es que se ha puesto un avatar que no le hace justicia.
Clovis,actualiza con algo que esta conversación esta derivando en temas incómodos para una chica moderna e inteligente como yo.
:D
pues yo vengo de recoger una mierda del perro.
ale ya toda la atención pa mí, no te preocupes..
"Y Millana es inteligente, moderna y atractiva." CLOVIS
Ya tienes otro fan, Millana. Entré por Clovis, qué regalo siempre leer lo que escribe, y ya voy haciéndome adicto a tu desparpajo.
Encima veo que te sigue también mi admirado y queridísimo fernando y ya no dudo.
Estupenda tu entrada, cómo activas el imaginario, con tus 21 años y Dickinson. Y puede que el tetrazepam jajaja.
Sigo, por otra parte, escuchando el Berlin y el Forever Changes, aunque me entristecen cada día más, como todas las añoranzas.
Desde Valencia,
Saludos,
Juan
la tierra de las flores.
normal..
Desconocia esta parte de tu pasado millana, me ha gustado el post, las batallitas contra mas escabrosas mejor!
Grandiosa entrada, la leí hace tiempo pero sigo recurriendo a ella cuando cerca de mí hay algún ser sumido en la tristeza... la leen y sanan. Millana escribe más, no nos abandones.
. Quelques détails vraiment intéressants que vous avez écrit sur blogmildred.blogspot.ru Assistée m'a beaucoup, juste ce que je cherchais: D.
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